Política, economía y sociedad: La Santísima Trinidad
- Ernesto Astonitas
- 27 nov 2020
- 2 Min. de lectura

Ideologías, pensamientos críticos, posturas revolucionarias, esto ha intoxicado el significado de las redes sociales como actores y justicieros a los ciudadanos. En la crisis actual de la pandemia, se ha puesto en cuestión como estos tres elementos van de la mano e interconectados. Ninguno de ellos puede actuar solo, son una ruleta que dependen de cada uno, porque una decisión hecha afecta al otro.
Una mala gestión administrativa, afecta al pueblo. El pueblo realiza críticas o malos trechos, las empresas se ven afectadas y el gobierno incapaz de mantener una estabilidad económica. La principal entidad pública de nuestro país es incapaz de equilibrar lo ético y suceden movimientos en contra de la corrupción, en contra de injusticias (caso sábado 14N en Perú). Entonces ¿Cuál es el equilibrio en estos tres? parece oblicuo, pero se necesitan.
Adam Smith, años antes de la Revolución Francesa, comenzó con el pensamiento económico y su rol protagónico en la sociedad. "Una investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones”. Claro, esto derivo en el nacimiento del capitalismo, la llegada de cuatro revoluciones industriales que permitió influir como actores sociales no sólo al ser humano. Lo curioso, es que estas transformaciones vienen de la mano con los movimientos sociales y las decisiones legislativas dentro de la política.
Ahora bien el problema en nuestro país recae en cómo manejar la "incertidumbre del consumidor" frente a la crisis actual. Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en 2019 la tasa de pobreza monetaria en el país rondaba el 20 %. El Informe Técnico del Mercado Laboral en Lima Metropolitana, el empleo en Lima tuvo una caída del 23.9 % en relación al mismo trimestre (julio-agosto-setiembre) en 2019. Es evidente que una gran mayoría descenderán el nivel socioeconómico del C al D. Los discursos siempre son engañosos.
No obstante, al gobierno no se le puede exigir todas las medidas de una mayoría o grupos sociales tras 5 años de crisis política, opacadas por la poca participación de la nueva generación. El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) tienen un gran reto en un periodo de transición llamada "alivio", pero no debemos ser ingenuos.

¿Robos? Quizá. ¿Problemas económicos? Perú tiene problemas de deuda desde siglos al ser un país exportador. Guano, caucho, salitre, cobre, pescado, entre otras malas decisiones conllevadas por la corrupción de nuestros gobernantes. ¿Cuál es la solución? participación, exigencia y tener conocimiento de lo que sucede en nuestro contexto. La sociedad también es un pilar crucial para el progreso de un país. Los daños están hechos, es cuestión de proyección por un futuro mejor para nuestra nación.
La santísima trinidad siempre se llevarán de la mano, eternos amigos, enemigos o aliados en Actor-reactor. El 2020 ya ha dado grandes lecciones en lo que nos depara para los próximos años en un país hermoso en cultura, una riqueza que debe ser aprovechada para beneficios en equilibrio. Ninguno es más ni menos responsable, a pesar de que la historia pruebe lo contrario (véase la imagen). El ciudadano tiene que estar atento, sino será una clásica prosperidad falaz.
Commenti